[Arata Review] Doraemon Story of Seasons: Friends of the Great Kingdom [Multi]
Nobita y el gato cósmico roban el corazón de Arami con su nueva aventura en Doraemon Story of Seasons: Friends of the Great Kingdom.
Las aventuras de un niño perezoso pueden no ser tan interesantes, hasta que mezclas a un carismático gato del espacio. Una premisa que a muchos les llegó a encantar, porque los problemas más cotidianos se podían volver toda una aventura. Y esa forma de armar las cosas está presente para la ocasión, tomando lo bueno de su aventura anterior. ¿Será posible que nuestro despistado protagonista aprenda algo, además de hacer nuevos amigos, en este mundo tan lejano?
HISTORIA DE DORAEMON STORY OF SEASONS FRIENDS OF THE GREAT KINGDOM
Bandai Namco nos trae otra locura más de Nobita, que acaba de terminar el periodo escolar. Las vacaciones de verano ya llegaron, pero ni un día pasa para que su madre le regañe por no cumplir una promesa. Esta era de comenzar a hacer los pendientes, esto sin importar el merecido descanso tras terminar el ciclo escolar. Las cosas terminan hartando a un niño que por impulsivo decide irse de casa junto a sus amigos. El felino cósmico decide ayudarles con un viaje que los llevará a otro mundo, un reino diferente, con maravillas inimaginables.
Doraemon Story of Seasons: Friends of the Great Kingdom toma la fórmula clásica de la granja, pero con nuevos compañeros. Ahora contaremos con Shizuka, Suneo y Gigante uniéndose a las tareas en diferentes áreas de este nuevo mundo. Podemos esperar lo típico del género al tener que cuidar el terreno de nuestra propia granja, para así poder cultivar. Cada herramienta tiene un uso específico para preparar la tierra utilizar las diferentes semillas que podemos comprar. Tienen una estación del año ideal para crecer, si nos equivocamos entonces va a marchitarse antes de tiempo. El color de la bolsa las identifica: roja para primavera, verde en verano, amarillas en otoño y azules para invierno.
Necesitas constancia para regar a diario con el agua, además del uso de fertilizante, para obtener la mejor calidad posible. El tipo y calidad del cultivo determinan el valor específico para su venta. Cuando están listos, los colocamos en una caja para que alguien los recoja al final del día y los cultivos sean vendidos de forma automática. Con el dinero podemos conseguir más semillas para repetir el proceso para crear una granja capaz de ser autosuficiente. Todo esto forma parte del arranque del juego, que a la vez funciona como tutorial, uno bastante lento. No es del todo malo, si el mismo funcionara en pos de la jugabilidad y no retenerla tanto tiempo. Como plus, a pesar de este inicio, puedes disfrutar de esta aventura con un amigo asumiendo el papel de Doraemon.
Una propuesta que adapta los diseños del anime a un estilo 3D cenital con una paleta de colores muy vívida. Los entornos que vamos a conocer son variados, llamativos, sin tener un aspecto que pueda cansar o molestar la vista. Los modelos, junto a las animaciones de los personajes, son igual de sencillos que la puesta en escena, pero carismáticos. Mención especial a la forma de introducir algo parecido al emoji, que enfatizan los diálogos o acciones en concreto.
La banda sonora tiene una tónica ambiental, con el típico enfoque relajante para no sentir presión mientras trabajamos nuestro terreno. Pero al mismo tiempo mantienen un toque ameno, muy carismático y risueño como sus atolondrados protagonistas. Hay varios diálogos con doblaje en japonés, pero en otros momentos solo serán simples divagaciones que complementan la escena. Suenan muy natural, pero sin resaltar tanto como otros títulos o experiencias similares.
Doraemon Story of Seasons: Friends of the Great Kingdom ofrece una aventura continuista, aunque podría haber arriesgado con alguna novedad. Es fácil y divertido de jugar, hasta los más pequeños lo puedan disfrutar, gracias a una buena traducción al español. Cuenta con uno de los rostros más visibles del entretenimiento, aunque se siente que no explotaron a fondo la licencia. Un gato con tantos artilugios puede hacer maravillas, lo cual podría dar lugar a mecánicas entorno a esta cualidad.