El equipo verde y morado se viste de seda en esta reimaginación que Arami no se perderá al visitar el mundo de Yooka-Replaylee.
HISTORIA DE YOOKA REPLAYLEE
Playtonic recolorea la historia de una iguana y un murciélago, un dúo que termina encontrando y liberando un libro mágico. Capital B al descubrir lo que ha perdido, activa su plan B que deriva en perder todas las pagies. Sin otro remedio que recomponer el libro, solo les queda buscarlas en cada mundo mágico. El primero que lo encuentre se lo queda para detener los planes del abejorro codicioso. Así se evitará que consiga todos los libros del mundo para revenderlos a sobreprecio.
JUGABILIDAD
Yooka-Replaylee podría parecer un retoque innecesario a la aventura original vista en 2017, pero esa sería una suposición errónea. No solo es un cambio estético, lleva las cosas más allá, como rediseñar el funcionamiento de la aventura y composición. Todo sin quitarle lo cautivador a la propuesta original, ser un viaje que recuerde la era dorada de los plataformeros. Esto casi raya la línea de un remake para dejar esta obra en lo que originalmente tenían pensado. Algo que en buena parte lo han logrado, cosa que pocos títulos pueden jactarse al recibir un trabajo así.
Empezamos con los controles, los cuales han mejorado respecto al juego original. Nuestros personajes son más responsivos, con un salto más preciso y acceso a todos los movimientos desde el principio. Se eliminó el doble salto en pos de ofrecer un salto único más potente que permite medir mejor la distancia. El único defecto es si activas la opción de alternar puede bugearse, impidiendo alternar entre agacharte o enroscarte. Fuera de ahí, lo demás funciona bien y ofrece mejor soltura para enfrentar los desafíos, especialmente los de tiempo. Al ya no patinarse, estos pasan de ser un tormento a un reto disfrutable.
La exploración entre los cambios más destacables está no tener pantallas de carga, un mapa para navegar. No acaba aquí la cosa, han recolocado todos los coleccionables como los pagies, plumas, monedas para aprovechar más sus mapas. En esta ocasión le dan más sentido a que rebusques en una esquina sospechosa que la cámara oculta. Un aspecto que ayuda a sentir que estás progresando a donde quiera que vayas. Otro aspecto son los minijuegos, se deshicieron de todo lo que no aporta para colocar otros con más sentido. Incluso algunos serán referencias a otros grandes del género que no pasarán desapercibidos. Ahora tenemos marcadores para saber qué hemos conseguido para no deambular como pollo perdido buscando en vano.
Con las pagies abriremos nuevos mundos por explorar, las plumas para conseguir trajes o mejoras esenciales. El mapa es otra novedad que estaba ausente, además de los viajes rápidos que se activan al encontrar los separadores. Contaremos con un arcade que requiere una moneda especial para acceder a un minijuego nostálgico de un retrosaurio poligónico pixelado. Los cráneos del tesoro y los Q.U.I.D.S. para los artículos de Vendi. Puede parecer mucho, pero al aventurarte se tiene una sensación diferente con la entrega original, es ameno buscar cada cosa. Otro cambio radica en el hub principal, donde cada mundo tiene su puerta abierta y solo debemos colocar las pagies.
La dinámica principal para avanzar se mantiene, conseguir cierta cantidad de pagies que desbloquean nuevos caminos. Nada fuera de lo común en el género, salvo que en esta ocasión han duplicado su total a 300. Cada mundo cuenta con 50 piezas, además de tener plumas de diferente color, ahora reducidas a 750 en total. Solo tendría algo desfavorecedor, que algunos minijuegos tienen físicas y esos pueden llegar a desesperarte. Entre todos los cambios obtenemos una aventura, que, si bien no es innovadora, es más redonda. Como añadido inesperado, nuestros protagonistas rompen la cuarta pared para recordar las fallas de su primera entrega. Un gesto que sin duda está inspirado en el dúo interpretado por un oso y un pájaro loco rojizo.
APARTADO GRÁFICO
Hay varias cosas que han cambiado, como los diálogos con fondo de pergamino para el texto. Algunas zonas tuvieron un rediseño para ser más llamativas o bien que el plataformeo tenga un reto desafiante, pero justo. Destaca los modelos con un shader menos colorido, pero con una iluminación mejorada y preservando su estilo caricaturesco. Las animaciones fueron adaptadas a la movilidad mejorada de los personajes y los jefes tienen barra de vida. El rendimiento es bueno en general, salvo algunos atorones momentáneos cuando carga un área nueva y de inmediato es fluido. Considero que la iluminación y diálogos del original le daban un toque más cercano a la antaña N64.
MÚSICA Y SONIDO
La banda sonora orquestal vuelve y está poco ha cambiado porque ya era buena. Un apartado que sigue siendo excelso, con sonidos que refuerza su comedia noventera. Los efectos se mantienen, pero las voces de los diálogos recibieron un pequeño cambio. Cuando hablan solían extender mucho sus sonidos, esta vez los han acortado para ser menos cansinos. Para algunos será extraño, pues en la aventura del otro dúo era normal oír bastante sus musitaciones. Yo lo considero positivo para las cinemáticas y su historia, hace menos cansino sus diálogos.
CONCLUSIÓN
Yooka-Replaylee sin ser un remake, ha logrado cambiar para bien su primera aventura en varios ámbitos. Deshacerse de lo que no funcionó para suplirlo con otras cosas que le permiten ser una aventura con sabor nostálgico. Las mejoras de calidad de vida hacen que brille como debe, además de ser más accesible para más jugadores. Los minijuegos de física considero pudieron ser mejores, pero el resto de los desafíos son variados y entretenidos. Un plataformero recomendable para los que buscan una aventura amena, no reinventa, pero con sabor clásico y bien planteada.