El lanzamiento de He is Coming confirma lo que la demo apenas dejaba entrever: un RPG roguelite de combate automático que exige paciencia, precisión y la voluntad de fracasar una y otra vez hasta encontrar la fórmula adecuada. La propuesta en acceso anticipado de Chronocle, con la distribución de Hooded Horse, logra refinar la experiencia inicial y entregarla con más equilibrio y frescura.
He is Coming
He is Coming es un juego desarrollado por el estudio independiente sueco Chronocle, compuesto por Niklas Östlund y Simon Lundgren. Niklas se encarga del arte, música y diseño, mientras que Simon se especializa en programación, interfaz de usuario y diseño. El juego es publicado por Hooded Horse, una editorial estadounidense conocida por su enfoque en juegos de estrategia y rol, como Against the Storm y Manor Lords
Historia
La narrativa se mantiene sencilla pero efectiva. El Rey Demonio regresa como la sombra inevitable sobre un mundo condenado. De día, exploramos en busca de artefactos y recursos; de noche, los secuaces del Rey emergen en oleadas implacables. No hay giros de guion rebuscados, pero sí un trasfondo que sostiene la tensión y convierte cada run en un duelo contra la oscuridad.
Jugabilidad
En He is Coming, cada partida se desarrolla a lo largo de tres noches llenas de tensión y mini jefes. Durante el día exploras y preparas a tu héroe, pero cuando cae la noche, los enemigos te persiguen implacables, obligándote a planear cada movimiento. A medida que avanzas, puedes combinar armas, armaduras y alimentos mágicos, además de descubrir equipo especial en las tumbas de los héroes, recompensas que potencian tu estrategia.
Para quienes buscan un desafío adicional, el juego incluye el modo Coronación, donde te enfrentas a las builds de otros jugadores, poniendo a prueba tu creatividad y dominio de la táctica.
Lo que cambia respecto a la demo es evidente:
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El balance de enemigos se siente más justo en las primeras partidas.
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Las builds son más variadas, lo que permite experimentar sin quedar atrapado en una sola estrategia.
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El ritmo de progresión ahora fluye mejor, reduciendo la sensación de estancamiento que la demo podía dar.
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El combate final mantiene la dificultad alta, pero resulta menos abrupto y más disfrutable.
Aun así, la curva de aprendizaje sigue siendo pronunciada. No es un juego para quienes buscan inmediatez: la derrota es parte del diseño y la victoria sabe mejor porque cuesta.
Diseño y gráficos
El estilo minimalista en pixel art sigue siendo su sello. No se añaden excesos gráficos, pero sí se pulen los detalles: animaciones más fluidas, entornos procedurales con más variaciones y una paleta que transmite la mezcla de nostalgia y tensión. El juego sabe usar el vacío y la oscuridad como parte activa del diseño, generando una atmósfera inquietante en cada exploración.
Sonido y música
La banda sonora de Niklas Östlund conserva sus tres piezas centrales, pero ahora con una integración más orgánica. Acompañan de manera precisa cada fase de la partida, evitando el desgaste que podía notarse en la demo tras muchas repeticiones. Los efectos retro, inspirados en los 8 bits, continúan siendo un puente perfecto hacia la nostalgia.
Conclusión
He is Coming logra lo que promete: un viaje retro que exige estrategia, paciencia y adaptación. Es un título que no se abre a todo el público; quien busque experiencias rápidas probablemente se frustre. Pero para los jugadores que disfrutan del reto y la experimentación táctica, se convierte en una experiencia absorbente que mezcla el sabor clásico del RPG con mecánicas modernas bien calibradas.
Chronocle y Hooded Horse mejoraron lo que en la demo era prometedor: balance, fluidez y diversidad estratégica. El resultado es un roguelite sólido que brilla tanto como homenaje al pasado como apuesta contemporánea.